Tras una prolongada sequía al menos 200 elefantes han muerto de hambre en el turístico Parque Nacional de Hwange, el más grande de Zimbabue y fronterizo con Botsuana, según confirmaron fuentes oficiales.
«Hemos perdido bastantes elefantes a causa del hambre, no hay comida. Estamos esperando desesperadamente que lleguen las lluvias», explicó Tinashe Farawo
Gran parte del sur de África atraviesa la falta de agua más grave de las últimas dos décadas dejando a millones de personas y animales dependientes de ayuda alimentaria.
Más elefantes han fallecido también a causa de esta sequía en el Parque Nacional de Mana Pools no se sabe aún el número total.
Los amantes de la vida silvestre han estado transportando miles de fardos de heno a Mana Pools para aliviar la escasez de alimentos; que también se ha cobrado la vida de cebras y búfalos.
Gran parte del sur de África atraviesa la peor sequía de las últimas dos décadas, que en Zimbabue ha arruinado a su vez los cultivos de alimentos básicos como el maíz.
Dejando a al menos siete millones de personas -aproximadamente la mitad de la población del país- dependientes de la ayuda alimentaria.
Estos efectos son cada vez más palpables entre la creciente población de paquidermos de Hwange, que este año aumentó de 23.000 ejemplares a 43.000.
De acuerdo con Bhejane Trust, manadas de «elefantes migrantes» han buscado refugio en el último año en Zimbabue procedentes de la vecina Botsuana.
El país con la mayor población de estos animales de África. Además de esto, las autoridades confirman que al menos 9.000 reses han muerto de hambre en las provincias de Matabeleland Norte y Sur, en el oeste de Zimbabue