Tal y como sucedió en Manchester United, David Moyes no considera al mexicano Javier Hernández como un elemento titular ahora como estratega del West Ham.
El arribo del escocés al equipo de Londres se calificó como la segunda parte de una pesadilla para el mexicano por el temor de volver a pasar más tiempo en la banca que en la cancha y tras dos meses, esa pesadilla ya es una realidad.
El mexicano arrancó en el banquillo en el triunfo de ayer del West Ham 2-1 sobre el West Bromwich, duelo en el que Hernández disputó los últimos 17 minutos.
Desde que Moyes tomó el mando de los Hammers, el tapatío no ha jugado como titular ningún partido de la Premier League y sólo ha disputado 76 minutos de los 540 en los últimos seis partidos en los que Hernández ha estado disponible (sólo el 14 por ciento), pues cabe recordar que el mexicano causó baja del equipo durante los primeros cuatro juegos con el técnico actual debido a una lesión.
El escaso juego del artillero mexicano ha repercutido en su rendimiento ante el arco rival, pues acumula más de dos meses sin gol. La última vez que agitó las redes fue el 28 de octubre en el empate 2-2 ante el Crystal Palace, duelo en el cual fue titular.
Sin embargo, pese al mal momento de Hernández, la suerte le empieza a sonreír al club de Londres, pues se impuso de último minuto al West Bromwich Albion y abandonó la zona de descenso al llegar a 21 unidades, además hundió a su rival, que es penúltimo con 16 puntos.
James McClean adelantó al Albion a los 30 minutos, pero en el complemento apareció Andy Carroll, quien no marcaba desde el mes de abril y ayer se lució con un doblete (59’ y 90’) para consumar la quinta victoria del West Ham en esta temporada.