Raquel Suárez
Luego de confirmar que desde el este miércoles los restaurantes fueron autorizados para abrir con un aforo del 33 por ciento, máximo, en su interior, el gobernador del estado, Miguel Barbosa Huerta, sentenció que aquellos que no respeten esta medida serán acreedores a la clausura temporal.
Durante la videoconferencia de prensa de esta mañana recordó que, igual que la Secretaría de Economía, los restaurantes podrán ofrecer servicio en un tercio de las mesas interiores -con un horario máximo de cierre a las 21:00 horas de lunes a sábado- cumpliendo puntualmente con las 10 “Reglas de Oro” y sumándose al “Pacto Comunitario”, con el fin de evitar contagios de COVID-19.
“Tenemos que estimular a nuestra sociedad y hoy quiero anunciar que hemos decidido abrir las actividades de restaurantes con un esquema de sana distancia entre los comensales y con una capacidad del 33 por ciento. Las reglas son las mismas, si hay una inspección y hay más del aforo permitido, pues se cierra tres horas y se abre”, dijo.
Comentó que ya comenzaron las sanciones para este sector, por lo que señaló que se mantendrá el rigor por parte de la autoridad para que la sociedad mantenga un comportamiento adecuado y los números, a causa de la pandemia, sean manejables.