Comerciantes del Centro Histórico reclaman a Claudia Rivera promesas incumplidas y el abandono a este sector

Manolo Zitle

El presidente de la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo de Puebla (Canaco), Marco Antonio Prósperi Calderón culpó a la edil con licencia, Claudia Rivera Vivanco y a la presidenta Municipal suplente, Argelia Arriaga García de no implementar acciones y programas para solucionar de raíz los problemas del comercio ambulante y las obras en el centro histórico, ocasionando que exista ingobernabilidad en la ciudad de Puebla.

Prósperi Calderón lamentó la falta de planeación y resultados en los proyectos de obra pública que iniciaron con bombo y platillo, pero que se quedaron inconclusos o a medias, generando daños importantes en las ventas del comercio establecido, por el cierre parcial de las calles del primer cuadro de la ciudad.

Consideró que existe un vacío de autoridad en el Ayuntamiento de Puebla al paralizar las acciones de obra pública con el pretexto de la veda electoral, lavándose las manos para no hacer ni decir nada, ante las obras en el zócalo de la ciudad que están paralizadas.

Asimismo, reprochó la complicidad del Ayuntamiento de Puebla al permitir el desbordamiento del comercio ambulante en el centro histórico, sin implementar acciones o políticas públicas para ordenar el comercio en las calles del primer cuadro de la ciudad. 

En este sentido, el presidente del Consejo de Comerciantes del Centro Histórico, José Juan Ayala Vázquez reprochó la falta de resultados de la edil con licencia y el olvido en el que dejó al comercio establecido, al no ejecutar un programa integral de reordenamiento comercial para erradicar el ambulantaje, ni impulsar la economía y garantizar la seguridad del comercio establecido y de la ciudadanía. Asimismo, recriminó que el Ayuntamiento de Puebla siga permitiendo el ejercicio de la prostitución a unas cuadras del Palacio Municipal.

Ayala Vázquez subrayó que Claudia Rivera Vivanco dejó muchos pendientes en la ciudad de Puebla y su gobierno dejó mucho que desear, ya que le dio la espalda al comercio formal y se olvidó de caminar por el centro histórico para ver la problemática que aún persiste en las calles.