Manolo Zitle
Ante la nueva ola de contagios por Covid-19, la administración municipal de Claudia Rivera Vivanco defiende a los vendedores ambulantes y culpa de las aglomeraciones en la vía pública a la gente que abarrota las calles del primer cuadro de la ciudad para comprar sus productos.
Tras evadir nuevamente su responsabilidad sobre el crecimiento exponencial del comercio ambulante, la titular de la secretaría de Gobernación Municipal, Catalina Pérez Osorio afirmó que las aglomeraciones que se presentan en las calles del centro histórico no son culpa de los ambulantes, sino de los ciudadanos que buscan comprar productos al menor precio posible.
“Es una exageración, en cuanto al supuesto crecimiento por parte del comercio ambulante, sí hay aglomeración pero no es la aglomeración por parte del comercio informal, es aglomeración de los ciudadanos que tienen que comprar al menor precio”, aseguró la funcionaria municipal.
Al defender nuevamente al comercio informal que se ha apoderado del primer cuadro de la ciudad, consideró que no se puede juzgar a las personas que tienen que comprar en la calle, debido a la crisis económica ocasionada por la Covid-19.
Ante la denuncia de algunos regidores que aseguran que el número de ambulantes en el centro histórico se duplicó durante la presente administración municipal, pasando de mil 500 a tres mil 800 comerciantes informales, Pérez Osorio se negó a dar cifras oficiales y mencionó que estas las dará a conocer al final de la administración.